La Asociación de Adoradores Laicos Guadalupanos es la rama laica del Instituto de Adoratrices Perpetuas Guadalupanas.
Se construyó en el curso 2003-2004, con el deseo de llevar a cabo en estos tiempos el anhelo de la Madre Fundadora, María de las Mercedes de la Santísima Trinidad Méndez Pérez Gil, de difundir su conocimiento, el amor y culto al Santísimo Sacramento, y así extender el reinado de la Eucaristía en los hogares y en la sociedad.


Así mismo, motivó a ello el desear hacer eco a las directrices del Papa San Juan Pablo II quien, en Exhortación Apotólica Vita Consecrata, invita a los Institutos religiosos a compartir con los laicos su carisma, misión y espiritualidad.
Forman parte de esta Asociación los fieles que, sintiéndose movidos a vivir la espiritualidad eucarítica y la misión de irradiar la Eucaristía en sus ambientes, se incorporan al Instituto de Adoratrices Perpetuas Guadalupanas mediante un compromiso temporal renovable, conforme a los Estatutos de la AALG.

Ambos, los Adoradores Laicos asociados y los no asociados, son considerados miembros laicos del Instituto, con los que comparte su carisma, espiritualidad y misión.
Se ha creado tambien una rama de Adoradores Laicos no asociados, que se comprometen solamente a hacer la Adoración Eucarística sin tener ninguna otra obligación.

La forma más significativa de participación es la Adoración eucarística, que hacen conforme a sus ocupaciones y de acuerdo a un horario específico, generalmente en las capillas de las religiosas APG.